ILERI nació en Barcelona en 2012. Nuestros primeros clientes fueron escuelas y empresas de diferentes sectores. En tan solo 4 años logramos, entre otros éxitos, el premio a la innovación educativa. ¡Fue tan maravilloso! Y no nos imaginábamos todo lo que estaba aún por llegar.

Nuestro objetivo es ayudar a las personas a poner palabras a emociones difíciles de explicar, a encontrar soluciones a conflictos enquistados y a dar luz a personas y organizaciones que se veían atrapadas en una espiral de desconcierto en la que avanzaban por inercia, sin rumbo ni timón.

A medida que crecíamos surgían nuevos retos. La gran revolución llegó el día que nuestros clientes nos pidieron trasladar lo que hacíamos en las empresas al ámbito más privado. Con nosotros sí veían posible encontrar una solución a situaciones que vivían y que por temor, por falta de tiempo o por darse por vencidos habían silenciado. La confianza que habíamos creado era máxima y ello propiciaba la fluidez de emociones, sentimientos, creencias, miedos o valores difíciles de compartir en otro espacio diferente al de ILERI. Sentían plena libertad para explicarnos la verdad de lo que vivían en la esfera privada (personal, familia y pareja) y en la profesional.